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Otro año hemos hecho realidad
nuestro proyecto cicloturista como año tras año vamos realizando. Este año nos
hemos querido quedar en la península, para ello solo tenía 11 días para dar una
vuelta por España y conseguir hacer esos 2000 km que suelo hacer en estas
fechas de abril y mayo.
En este viaje me había planteado
pedalear unas 10h u 11 horas diarias, por lo que el tiempo era muy justo para
recuperarme, por eso opte por la opción de aprovecharme de hostales y
Pensiones, donde gracias a ello pedaleaba hasta cerca del anochecer para hacer
las distancias aproximadas de 200km diarios con mi bici y mis macutos que
seguro que pasaban el peso de 40kg. El mal tiempo, viento de cara, lluvia, nieve, problemas mecánicos. Han sido
las razones para no cumplir horarios y tener que variar en alguna ocasión la
ruta a seguir. No por ello hemos dejado de aprender, de saber funcionar con
problemas adicionales a los planeados, aprendiendo y poniendo a prueba nuestro
conocimiento y adaptación al medio.
Salimos a primera hora de la
mañana para llegar pronto a Illueca donde Conozco a Toñin que me acompaña
durante 40 km hasta Calatayud sirviéndome de guía y enseñándome toda la cuenca
del río Jalón. Pasó Monasterio de Piedra, y con aire ya de cara me dirijo a
Molina de Aragón. Subiendo y bajando entro en la cuenca de río Tajo. Entro ya
en la provincia de Cuenca y por un guapísimo valle entre murallas y paredes
llegamos al pueblo de Priego y lugar donde nació el ciclista Luis Ocaña, tras
arreglar un pinchazo de última hora. 12h 37´de pedaleo y 208km de distancia.
Saliendo a primera hora de la
mañana, el viento de sur sigue subiendo hacia a mí, siendo el ritmo en el llano
muy lento y un poco desesperante, parece que siempre estás en el mismo sitio.
Solo me hace ve r la realidad el cuenta km que me dice que los Km van
pasando. Así y por fin llego al pueblo
de Alcaráz donde tras tomar un bocata empieza la montaña la cual la cojo con
deseo.
A primera hora de la mañana un
cambio de planes me hace reflexionar para tomar otro itinerario, pues el primer
plan descubro que acaba en Autovía. Tomo la carretera hacia Oulula del río. Empiezo la etapa y
empieza a llover de una forma cada vez más intensa. Sé que voy a tener que
regular el ritmo al final con el abrigo impermeable que llevo veo que el agua
casi no entra y me animo a seguir para adelante hasta empezar el largo
puerto que sube al pueblo de Thaal. Una
vez arriba deja de llover y la bajada es impresionante y bonita con el
escenario de fondo del desierto de Tabernas. Lugar donde se han rodado muchas
películas de welters. Tras tomar un
bocado me dirijo a Almería y luego por toda la costa llego al punto pensado que
tenia de retorno “Cabo de Gata”. Tras un rato admirando este lugar sigo
dirección este por la costa para que rodando con cuidado por una bonita pista
de 15 km llego al pueblo de San José. Esta etapa ha sido 182 km de distancia
con 9h35´de pedaleo y con una media de 15km/h.
La mañana comienza con fuerte
tormenta y aguacero, no tengo prisa y espero en la cafetería hablando con la
gente del pueblo. Pierdo 2h de mañana y cuando me decido a salir la tormenta
cesa. La mañana va siendo buena y tomo unas carreteras pequeñas y bacheadas
pasando por la presa de Alfonso XII, para llegar a Utiel, teniendo anterior
mente otro pinchazo.
Otro día más, está nublado pero
no llueve. Buena señal de ánimo. Empezamos y poco a poco empezamos a subir por
una entretenida y suave carretera que nos hace entrar durante unos cuantos
kilómetros en la provincia de Cuenca. La nieve empieza hacer acto de presencia
en la cuneta de la carretera. El contraste entre la nieve y los almendros ya
con sus hojas verdes resulta una imagen llamativa. Así llegamos hasta la cota
1100m para en una fuerte bajada pierdo bastante altura para llegar al pueblo
valenciano del Rincón de Aldemuz. Un café, un estirar de pierna y a tomar dirección
Teruel, que me resulta el trayecto más suave de lo que pensaba, aunque ha medio
trayecto empieza otra vez la conocida lluvia. Así llego a Teruel con la idea de
comerme un suculento bocata de jamón serrano, el cual veo que no se han
estirado mucho con el después de pedir un buen bocata. Por lo que me quedo con
la imagen un poco pobre de la situación. Seguro que en algún otro sitio hubiera
comido mejor. Salgo de nuevo por la tarde a pedalear sin saber hasta dónde voy
a llegar. Cambio la dirección de la ruta hacia el norte y Jo, que barbaridad,
la fuerte lluvia y el viento se ve claramente que van contra mí y me quieren
hacer rendir. Llegare hasta donde pueda me decía a mí mismo. Con frio, cansado
y con las manos entumecidas, llego hasta Calamocha ya con muy poca luz y decido
parar. Lo que más me apetece en esos momentos es cenar para recuperarme. Así
conseguir hacer 190 km, con 10h 23¨de
pedaleo. Toca dormir y descansar tras este duro día.
Mi mente se levanta pensando que
esta podía ser la última etapa de este viaje, aunque también pienso que me
queda un día de margen para acabar mis vacaciones. Bueno no hay que darle más
vueltas, un café, unos bollos y para delante.
El día un poco nubladillo pero no amenaza lluvia. Los charcos de la
carretera hacen mención de que ha caído todo durante la noche. Cojo un ritmo cómodo
y sin viento y veo que voy más animado y más rápido que en días anteriores.
Claro quitando el Pueblo de Paniza hasta Zaragoza, todo es cuesta abajo y sin
viento que me frene. Paso por Daroca y un extraño ruido me hace comerme el coco
de lo que puede pasar. Miro hacia los platos y veo que entre pedaleada el grande y el mediano se van separando. Paro
alarmándome y veo que de los 4 tornillos he perdido 2. Los quito y los cruzo
para darle mayor fuerza y con miedo a que se suelten tiro para adelante. Hasta
Zaragoza bien. Lo cruzo todo por carril bici hasta salir por la carretera de
Santa Isabel. Mañana tranquila y tarde
ventosa de nuevo. Veo que el ritmo baja, y si decidiera intentar llegar a
Sabiñanigo, llegaría a las 12h de la noche. Por lo que llego a Huesca, arreglo
en el taller de bicis de ciclos Coret mi sufrida maquina. Llamo a mi amigo
Ramón y a Javi y vamos a tomar unas cervezas y posponemos la llegada para el
próximo día tras haber pedaleado 190km y 9h30´de pedaleo, habiendo realizado
una media de 17km/h.
Salgo de Huesca sin a madrugar
mucho, pues la distancia a realizar es de 60km. Todo parece estar chupado, pero
a los 6km pinchazo. Nada con tranquilidad arreglo y sigo, los 15km de llano se
me hacen pesados hasta que llego a Nueno y tomo la carretera vieja del puerto
de Cotefablo. Paso los túneles y llego
al embalse de Arguis. Sigo por la
carretera vieja dirección al Oscuro túnel de la Manzanera, el cual paso con mis
luces. Subo hasta el final del asfalto donde nos separa una pista de tierra de
200m de distancia. Pasamos el guardarriel y pasamos a la carretera nacional en
la parte alta del puerto. Empezando a bajar enseguida volvemos a la carretera
vieja, pasamos por las ruinas de Escusaguas y bajando llegamos a fin del puerto
por esta entretenida y olvidada carretera. 15 km mas y llego a Sabiñanigo
acabando aquí esta inolvidable y dura vuelta que he realizado con mi bici y mi
esfuerzo.
La primera idea es hacerlo con buen tiempo o y en buena época, cosa que en
pleno invierno no lo intentaría. Me ha tocado pasar por sorpresa este poco de
invierno y lo he afrontado con seguridad, saliendo de todos los problemas y
aclimatándome a todos los fenómenos atmosféricos. La experiencia ha sido muy
satisfactoria para completar un poco más mi experiencia cicloturista.
Otro año hemos hecho realidad
nuestro proyecto cicloturista como año tras año vamos realizando. Este año nos
hemos querido quedar en la península, para ello solo tenía 11 días para dar una
vuelta por España y conseguir hacer esos 2000 km que suelo hacer en estas
fechas de abril y mayo.
Primeramente piensas en lo que
podía ser el recorrido en este caso el proyecto era salir de Sabiñanigo, bajar
hasta Cabo de Gata en Almería y subir otra vez a Sabiñanigo intentando hacer
todo carreteras regionales intentando tocar lo menos posible las Nacionales. Prácticamente
así ha sido, a no ser por zonas que a consecuencia de mal tiempo podían
convertirse un poco en zonas criticas debido a las cuotas altas a subir, la
lejanía entre los pueblos donde podía encontrar para comer y dormir y esos
pueblos pequeños en los que no podría encontrar esas necesidades que buscaba.
En este viaje me había planteado
pedalear unas 10h u 11 horas diarias, por lo que el tiempo era muy justo para
recuperarme, por eso opte por la opción de aprovecharme de hostales y
Pensiones, donde gracias a ello pedaleaba hasta cerca del anochecer para hacer
las distancias aproximadas de 200km diarios con mi bici y mis macutos que
seguro que pasaban el peso de 40kg. El mal tiempo, viento de cara, lluvia, nieve, problemas mecánicos. Han sido
las razones para no cumplir horarios y tener que variar en alguna ocasión la
ruta a seguir. No por ello hemos dejado de aprender, de saber funcionar con
problemas adicionales a los planeados, aprendiendo y poniendo a prueba nuestro
conocimiento y adaptación al medio.
Durante 11 días estas son las
etapas realizadas pasando por las provincias de Huesca, Zaragoza, Guadalajara, Cuenca, Ciudad Real,
Jaén, Granada, Almería, Murcia, Valencia, Teruel.
Saliendo de Sabiñanigo a los 20
km primera incidencia, cadena partida la cual reparo al recordar que guardaba
un eslabón de otras ocasiones. Al
principio tanto la bici como la persona necesita un periodo de un par de días
para adaptarse a este deporte. Comida es Erla y
por la mañana mucho aire Frontal. Paso por Ainzon, Puerto de la Chabola
y bajada a Tierga provincia de Zaragoza. 210 km realizados con 10h de pedaleo.
Salimos a primera hora de la
mañana para llegar pronto a Illueca donde Conozco a Toñin que me acompaña
durante 40 km hasta Calatayud sirviéndome de guía y enseñándome toda la cuenca
del río Jalón. Pasó Monasterio de Piedra, y con aire ya de cara me dirijo a
Molina de Aragón. Subiendo y bajando entro en la cuenca de río Tajo. Entro ya
en la provincia de Cuenca y por un guapísimo valle entre murallas y paredes
llegamos al pueblo de Priego y lugar donde nació el ciclista Luis Ocaña, tras
arreglar un pinchazo de última hora. 12h 37´de pedaleo y 208km de distancia.
Después del fin de semana y con
todos los talleres cerrados, empieza el lunes con la idea de llegar a Cuenca
para ir a un mecánico de bicis y pone a punto la mía, pregunto a una señora por
Al campo (supermercado), y me dice que si que por Cuenca hay muchos paseos muy
bonitos por el campo en bici. Al medio día y ya comido salgo de Cuenca. Hora
tras hora pedaleando y entramos de lleno en la Mancha donde las grandísimas
llanuras hacen perder la vista en el horizonte, aunque todo el viento de Sur
viene de frente a mí. Así de esta manera tras hacer una distancia de 191km, 9h
de pedaleo y una media de 16km/h, llegamos al pueblo de Socuéllamos, donde
aprovecho la tarde para dar un paseo por este bonito pueblo.
Saliendo a primera hora de la
mañana, el viento de sur sigue subiendo hacia a mí, siendo el ritmo en el llano
muy lento y un poco desesperante, parece que siempre estás en el mismo sitio.
Solo me hace ve r la realidad el cuenta km que me dice que los Km van
pasando. Así y por fin llego al pueblo
de Alcaráz donde tras tomar un bocata empieza la montaña la cual la cojo con
deseo.
El aburrimiento ha acabado y
cambio el asfalto por una pista de tierra para alcorzar y asi llegar antes a
Riopar y al nacimiento del río Mondo. Estoy cruzando ya la sierra de Segura
dirección a la Provincia de Jaén. Entro
en Andalucía cojo el bonito valle que nos conduce al embalse del Tranco, ya
atardeciendo y después de hacer 15km mas llego a las proximidades de Arroyo
Frio en el parque natural de Cazorla y donde hago parada después de esos 212km,
después de 11h de pedaleo.
El día empieza frio en la sierra,
aunque pronto empiezo a entrar en calor subiendo al puerto de las Palomas
(1290m). Una bonita y larga pasada nos baja hacia el bonito y animado pueblo de
Cazorla a la vista de los campos de Olivos de Jaén. De aquí por una pequeña carretera pasamos al
Pueblo de Quesada donde empieza otro puerto de 15km de largo que enamora con su
esplendido paisaje entre los pueblos, peñas y bosque que encierra la cara sur.
La bajada es fría, el tiempo está cambiando y al llegar abajo y tomar dirección este hacia el pueblo de Baza
el fuerte viento aparece haciéndome aflojar bastante el ritmo. Tras hacer 130
km, 7h40´con una media de 13km/h, decido parar en Baza, pues el próximo pueblo
está a 40 km en la montaña y atardeciendo. Por lo que decido que aun habiendo
realizado pocos km, es más seguro parar en este pueblo y hacer turismo.
A primera hora de la mañana un
cambio de planes me hace reflexionar para tomar otro itinerario, pues el primer
plan descubro que acaba en Autovía. Tomo la carretera hacia Oulula del río. Empiezo la etapa y
empieza a llover de una forma cada vez más intensa. Sé que voy a tener que
regular el ritmo al final con el abrigo impermeable que llevo veo que el agua
casi no entra y me animo a seguir para adelante hasta empezar el largo
puerto que sube al pueblo de Thaal. Una
vez arriba deja de llover y la bajada es impresionante y bonita con el
escenario de fondo del desierto de Tabernas. Lugar donde se han rodado muchas
películas de welters. Tras tomar un
bocado me dirijo a Almería y luego por toda la costa llego al punto pensado que
tenia de retorno “Cabo de Gata”. Tras un rato admirando este lugar sigo
dirección este por la costa para que rodando con cuidado por una bonita pista
de 15 km llego al pueblo de San José. Esta etapa ha sido 182 km de distancia
con 9h35´de pedaleo y con una media de 15km/h.
Esplendida mañana para pedalear
por la costa de Almería entre subidas y bajadas y por suerte con aire de
poniente, asegurando de esta manera el
día de pedaleo. Para los próximos días el tiempo cambiara a peor, según los
medios de comunicación, mientras tanto a disfrutar del día toca. Llegando a Águilas,
ya en provincia de Murcia aprovecho a comer y dejar la costa orientándome
dirección norte. El aire sigue ayudando y sigo animándome, llego a Lorca, lugar
donde pretendía parar, aun queda tarde y decido seguir. Quiero hacer 50km mas y
me adentro en la montaña, no sé lo que me voy a encontrar, los pueblos que hay
son muy pequeños y me doy cuenta de que tengo que subir un importante puerto de
montaña. La tarde se va pasando y yo voy muy despacio. Al final corono el
Puerto empieza a hacer viento y empieza a llover, el puerto por bacheada
carretera hace que el descenso sea lento y frio. Ya anocheciendo llego Al
pueblo de Bullas donde me alojo en un Hostal para recupérame. Este día han sido 203km, con 10h17´de pedaleo
y haciendo una media de 16km/h.
La mañana comienza con fuerte
tormenta y aguacero, no tengo prisa y espero en la cafetería hablando con la
gente del pueblo. Pierdo 2h de mañana y cuando me decido a salir la tormenta
cesa. La mañana va siendo buena y tomo unas carreteras pequeñas y bacheadas
pasando por la presa de Alfonso XII, para llegar a Utiel, teniendo anterior
mente otro pinchazo.
Después de comer en Utiel, tomo
dirección a Albacete, que raro, comienza
hacer un fuerte viento frontal. Ya me da igual, empiezo a estar acostumbrado
a vientecillo este. Así bajando el ritmo
llego a mi corta meta de 151km, con 8h 16´ de pedaleo, y paro Albacete ciudad.
No me apena nada el parar. Sábado tarde noche. Que mejor que una buena cena en
un kebab y alguna cerveza por la noche. Así que otro día será.
El pronóstico de tiempo para este
día es muy jodido, El telediario por la mañana marca lluvia y nieve. Lo de la
nieve no me lo creo y antes de partir y asumir el nuevo trayecto donde no he
puesto límite y ubicación del fin de la etapa, decido salir a la cafetería y
tomarme un chocolate con porras. Una vez el capricho cumplido y disfrutado toca
partir. Cruzo toda la ciudad de Albacete y me pongo ya en carretera dirección
noreste. Meca el telediario se había olvidado de mencionar el viento.
Bueno, que carajo, lo asumo con rapidez,
bajo mi cabeza y a un ritmo muy lento empiezo el constante pedaleo. Llueve y
sigue lloviendo, a los 30 km ya es nieve y a los 50 decido parar en el pueblo
Casas de Ibáñez a secarme un poco y a tomarme un suculento bocata de tortilla
de queso. Empiezo de nuevo la marcha más animado, por dentro he sabido mantener
en esta primera parte la temperatura corporal y el ritmo, dejando atrás los
aburridos llanos de la mancha y entrando ya en otro terreno de bosques, curvas
y algo de monte. Así con 115km y con 7h
de pedaleo, llego al Pueblo de Utiel (Valencia). Tomo una cerveza en la
cafetería, pregunto por el próximo pueblo con alojamiento. Me dicen que esta a
30km pero que no se me ocurra salir cara la noche, pues en la carretera sin
trafico está nevando de narices. Dicen los del pueblo. Nada a Parar y toca
buscarme la vida en el hotel para secar la ropa.
Otro día más, está nublado pero
no llueve. Buena señal de ánimo. Empezamos y poco a poco empezamos a subir por
una entretenida y suave carretera que nos hace entrar durante unos cuantos
kilómetros en la provincia de Cuenca. La nieve empieza hacer acto de presencia
en la cuneta de la carretera. El contraste entre la nieve y los almendros ya
con sus hojas verdes resulta una imagen llamativa. Así llegamos hasta la cota
1100m para en una fuerte bajada pierdo bastante altura para llegar al pueblo
valenciano del Rincón de Aldemuz. Un café, un estirar de pierna y a tomar dirección
Teruel, que me resulta el trayecto más suave de lo que pensaba, aunque ha medio
trayecto empieza otra vez la conocida lluvia. Así llego a Teruel con la idea de
comerme un suculento bocata de jamón serrano, el cual veo que no se han
estirado mucho con el después de pedir un buen bocata. Por lo que me quedo con
la imagen un poco pobre de la situación. Seguro que en algún otro sitio hubiera
comido mejor. Salgo de nuevo por la tarde a pedalear sin saber hasta dónde voy
a llegar. Cambio la dirección de la ruta hacia el norte y Jo, que barbaridad,
la fuerte lluvia y el viento se ve claramente que van contra mí y me quieren
hacer rendir. Llegare hasta donde pueda me decía a mí mismo. Con frio, cansado
y con las manos entumecidas, llego hasta Calamocha ya con muy poca luz y decido
parar. Lo que más me apetece en esos momentos es cenar para recuperarme. Así
conseguir hacer 190 km, con 10h 23¨de
pedaleo. Toca dormir y descansar tras este duro día.
Mi mente se levanta pensando que
esta podía ser la última etapa de este viaje, aunque también pienso que me
queda un día de margen para acabar mis vacaciones. Bueno no hay que darle más
vueltas, un café, unos bollos y para delante.
El día un poco nubladillo pero no amenaza lluvia. Los charcos de la
carretera hacen mención de que ha caído todo durante la noche. Cojo un ritmo cómodo
y sin viento y veo que voy más animado y más rápido que en días anteriores.
Claro quitando el Pueblo de Paniza hasta Zaragoza, todo es cuesta abajo y sin
viento que me frene. Paso por Daroca y un extraño ruido me hace comerme el coco
de lo que puede pasar. Miro hacia los platos y veo que entre pedaleada el grande y el mediano se van separando. Paro
alarmándome y veo que de los 4 tornillos he perdido 2. Los quito y los cruzo
para darle mayor fuerza y con miedo a que se suelten tiro para adelante. Hasta
Zaragoza bien. Lo cruzo todo por carril bici hasta salir por la carretera de
Santa Isabel. Mañana tranquila y tarde
ventosa de nuevo. Veo que el ritmo baja, y si decidiera intentar llegar a
Sabiñanigo, llegaría a las 12h de la noche. Por lo que llego a Huesca, arreglo
en el taller de bicis de ciclos Coret mi sufrida maquina. Llamo a mi amigo
Ramón y a Javi y vamos a tomar unas cervezas y posponemos la llegada para el
próximo día tras haber pedaleado 190km y 9h30´de pedaleo, habiendo realizado
una media de 17km/h.
Salgo de Huesca sin a madrugar
mucho, pues la distancia a realizar es de 60km. Todo parece estar chupado, pero
a los 6km pinchazo. Nada con tranquilidad arreglo y sigo, los 15km de llano se
me hacen pesados hasta que llego a Nueno y tomo la carretera vieja del puerto
de Cotefablo. Paso los túneles y llego
al embalse de Arguis. Sigo por la
carretera vieja dirección al Oscuro túnel de la Manzanera, el cual paso con mis
luces. Subo hasta el final del asfalto donde nos separa una pista de tierra de
200m de distancia. Pasamos el guardarriel y pasamos a la carretera nacional en
la parte alta del puerto. Empezando a bajar enseguida volvemos a la carretera
vieja, pasamos por las ruinas de Escusaguas y bajando llegamos a fin del puerto
por esta entretenida y olvidada carretera. 15 km mas y llego a Sabiñanigo
acabando aquí esta inolvidable y dura vuelta que he realizado con mi bici y mi
esfuerzo.
Han sido 2040km con 98h de pedaleo, utilizando
11días para completar mi peculiar vuelta.
¿Vale la pena haber hecho este recorrido?
Por lo tanto y Satisfecho. Animaros
a haceros cicloturistas, hay mucho que ver por España y fuera de ella. Seguro
que repetís. Pasareis unas experiencias únicas, y te cultivaras como viajero
sin fronteras.
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