- Desnivel acumulado: 3200m.
-Altura mínima: 760m.
-Altura máxima: 2300m
-Tiempo: Entre 5h y 7h corriendo.
-Velocidad: 5- 6km/h.
-Época: Final de primavera, Verano, Otoño.
VIDEO FAJA DE LAS FLORES. Pincha aquí.
Espectacular vuelta, tanto por su hermosura como por sus abismos y alturas que se superan en la zona del parque nacional de Ordesa. La idea es pasar corriendo por tres de las emblemáticas fajas que atraviesan las paredes del parque. Para ello salimos de la pradera de Ordesa de donde nos dirigiremos a el circo de Carriata en pocos minutos, a partir de aquí una larguísima subida empieza, pasamos de las hayas al abeto y al pino negro, hasta llegar al final del Bosque y por terreno de manto verde trepando alguna roca y muralla con ayuda de clavijas y pasando al lado de la majestuosa pared del tozal del Mallo, donde con facilidad podremos ver algún rebeco, llegamos al principio de la estrecha y aérea faja de las flores donde en cuestión de 1´5 km aproximadamente la atravesaremos sin ninguna dificultad. (Cuidado en invierno y con hielo, puede resultar muy peligrosa).
Cruzamos por un puente el barranco de Cotatuero por debajo de la gran cascada. Esta faja también es bastante aérea aunque no tiene comparación con la que habíamos pasado. Su gran bosque colgado no nos deja apreciar tanto como antes sus abismos. El camino es precioso cuando empieza a bajar por su oscuro bosque de hayas hasta que salimos al camino normal que nos lleva a las gradas de Soaso y por tanto a la famosa cascada de Cola Caballo, atravesando todo su circo al pie de Monte Perdido. De aquí tomamos la tercera faja tras cruzar el puentecito metálico que hay al pie de la cascada y que nos mete en el sendero de la faja la de Pelay o Senda de los cazadores que aunque muy larga no hay tantos desniveles como anteriormente. Atención esta faja en invierno, suele ser también muy peligrosa. Así proseguimos un buen rato corriendo entre paredes, desfiladeros impresionantes, donde el valle se va quedando muy por debajo de nosotros aunque podemos apreciar sin ninguna dificultad toda la subida normal del valle, donde cientos de excursionistas recorren todos los días ese camino del parque hasta cola caballo. Así para llegaremos al gran mirador que se encuentra a varios centenares de metros por encima de la pradera de Ordesa que se encuentra allá abajo. Magnifica vista de una buena parte del parque.
Ya solo nos queda bajar. La bajada es brutal y infernal, pues aunque sus montones de zetas bajan muy bien trazadas, en estos momentos ya encontramos las plantas de los pies algo delicadas y al menor guijarro que aparezca bajo nuestra zapatilla nos hace ver las estrellas, aparte hay que retencionar mucho en esta bajada muestras piernas para no coger demasiada velocidad, pues una caída podría resultar muy peligrosa. La dureza de la bajada no significa nada para poder apreciar la belleza de este impresionante camino con su gran bosque que se encuentra aquí colgado. Así llegamos al fondo del valle para tras cruzar un puente de madera poder llegar enseguida a la pradera de Ordesa. Si paras a descansar y miras hacia arriba y ves los murallones por donde has pasado te parecerá increíble decir. ¿Allí he estado yo hace unas horas? Increíble pero cierto.