Recuerdo
con añoranza esa primera vez que Salí con mi bici de San Sebastián, diciendo en
casa que me marchaba a pasar unos días a casa de un amigo por los Monegros. Me
plantee sobre un mapa, cruzar los valles más lógicos, empalmando pistas,
caminos, canchales, collados de más de 2600 m con mi bici a la espalda y un
sinfín de zonas que entonces podría resultar una locura para que nadie lo
repitiera.
Al contrario
que ahora, quiero volver a revivir otra
vez esos momentos y experiencia única de aquella época de mi vida. Me doy
cuenta y soy consciente que ya no tengo esa juventud, me falta esa fuerza de
entonces, me doy cuenta que estoy un poco más torpe en mis movimientos.
Pues por
todo esto y más, voy a intentar hacer en verano una de las mías y hacer este
proyecto de nuevo realidad.
Después de
estos 30 años, la mentalidad de muchos bikers ha cambiado al igual que sus
bicis y lo que antes podría ser una locura, ahora puede llegar a ser una
entretenida y una ruta que la gente quiera repetir, experimentar o simplemente
pensar en ella y planteárselo en sus cabezas.

Trabajaremos
en el proyecto de mis vacaciones cañeras.