miércoles, abril 13, 2011

UNA PECULIAR VUELTA A PEÑA GUARA DE UN PAR DE AMIGOS

SUBIDA A GUARA
El calor aprieta, pero no ahoga, a nosotros casi nos ahoga. Salimos de Huesca en coche hasta Vadiello (palacio de Congresos de Huesca) a las 7 de la mañana Roberto, Alberto (alias Bolea) y yo, en pantalón corto y con camiseta de manga corta. Aparcamos en el parking de la presa de Vadiello, Comenzamos a correr camino desde Vadiello a Nocito por “la senda de los Carboneros. La senda hasta Nocito está completamente limpia, picada la piedra, haciendo escaleras, y según alguna información pretenden poner barandillas de Madera. Me parece excesivo. Limpieza bien, pero barandillas y escaleras, creo que no es necesario. Los caballos no pueden pasar. Tras cruzar el túnel, un continuo sube y baja nos lleva en 50 minutos a la cola del pantano. Cruzamos el río por unas rocas con un palo para no perder el equilibrio, no nos hemos mojado los pies, el pantano no está lo suficientemente alto como para no poder pasar. Una vez cruzado el río, cogemos ya la senda de los carboneros propiamente dicha, con algunos repechos bastante durillos, pero que tras estos permite correr bastante.
 Tras un buen rato hay que volver a cruzar el río, otra vez por las piedras, no nos mojamos, solo un poquito. Siguiendo la senda sin dejarla, llegamos a la pista con cartel indicador de Vadiello, Dolmen del Palomar, y Santa Eulalia, pero en vez de seguir la pista por la que habría varias veces el río y mojarse, decidimos seguir el camino que han limpiado y aunque subes más no tienes que cruzar el río, ni mojarte. Tras 2h 15m. llegamos a Nocito. Comemos el bocadillo. Y tras un cuarto de hora de reposo, seguimos la senda hasta San Urbez, Bentue de Nocito y Used. Último lugar donde cogeremos agua hasta la fuente del Chinebro. Bajamos la carretera y seguimos los mojones ya en dirección al Cabezo, senda por lo demás bastante limpia que lleva a un abrevadero. Aquí hay una bifurcación, cogemos la de la derecha que nos lleva con alcuerces de la pista hasta el refugio de forestales. “Quizás la de la izquierda suba más directa al Cabezo, pero hablando con el forestal en Nocito, nos dijo que estaba bastante sucia” . Desde aquí Bolea dice que ya tiente bastante, que todavía lleva pocos días de entreno ( la época de caza acaba de finalizar) y que se sube a Guara por la bajada de la carrera al Tozal, Roberto y yo decidimos seguir con el plan. Corremos la pista de las Fenales hasta el final, donde en una curva sale la senda que nos llevará hasta un collado donde ya se ven el Cabezo y el Cubillar (Tozal de Cubilas o de los Buitres). Sin parar y siguiendo los mojones llegamos al Cabezo. Trago de agua, escasa por otra parte, y bajamos a lo salvaje (muy mal) hasta un collado para coger la pista (si se puede llamar pista) que sube al Cubillar. Y ya por toda la cresta corremos excepto en las subidas duras hasta Guara, apretando al final para bajar de las 7 horas. Total 6 horas 59 minutos y algún segundo.
 En la cima un perro me lame las piernas, por lo visto le falta sal, tras comer un poco y beber algo menos, bajamos por la subida del Collado de Petreñales, el calor sigue apretando, corriendo sin parar llegamos a la fuente del Chinebro, baja un hilillo, por lo que cogemos poca agua con tierra y hojarasca, la beberemos en caso de emergencia. “No nos quedará otros huevos”. De aquí vamos al collado de Petreñales, Corcurezo y por la cresta Ronera hasta el Fragineto. El agua escasea y la sed aprieta, por lo que bebemos el agua de emergencia, luego nos lamentaríamos de no haber cogido más, para filtro utilizamos el buf. ¡Qué fresquita y buena estaba! Pero escasa. Nos queda un sorbo para el Montidinera, al que llegamos tras haber hecho algún rato el jabalí sin senda y trepando una pared. Deberíamos haber ido hacia el sur algo antes de ver la pared. Último trago con el filtro de emergencia en Montidinera y para abajo, completamente deshidratados, la musculatura lo sufre. Ya en la pista se corre mejor y los músculos se relajan. En vez de ir directo a Vadiello y acabar, decidimos ir a Fuen Santa a coger agua y beber.
Dicen que el agua es incolora, inodora e insípida. En nuestra mente la vemos con hermosos colores, azules, frescos, la olemos con un olor penetrante a agua, inmejorable olor, y la saboreamos como la mejor paella, sabe a agua, pura, fresca, cristalina en otras palabras un diamante tallado. Bebemos hasta saciar nuestra sed, casi un litro. Y continuamos para Vadiello. Teo nos llama, ¿por donde estáis?, le contestamos que a cinco minutos. Suenan las sirenas, Teo haciendo ruido, y con la cervecita fresca en la mano. Nos dura lo que dura un silbido, pis pas. Y colorín colorado este cuento se ha acabado. 56km. 450 metros. 3.290 metros positivos y otros tantos negativos. 10 horas y 19 minutos, paradas incluidas. Solo un problema en esta excursión: falta de agua.

Javi Sanagustin

2 comentarios:

javier dijo...

Muy interesante el recorrido y parece que bastante duro. Igual lo intento mas adelante o al menos alguna parte. La zona me parece una maravillo.
Saludos
http://apostayadrede.blogspot.com/

karlos dijo...

Muy chula e interesante. La apuntamos en la agenda para hacerla antes de que apriete el calor.
Nosotoros también subimos a Guara el sabado, pero por la noche, de 8 a 12 de la noche y solo desde Santa Cilia, también en pantalón corto, aunque no nos falto agua...