Bueno, otra más para esta temporada que acaba de empezar. Y las que quedan. Buenísimo día en Talamantes, una carrera por montaña a tener en cuenta de 27km de distancia y 1600m de subida acumulada. Salida sin frio y en la parte alta una suave brisa que hacia disfrutar del día. Recuerdo el año pasado celebrando la Talamantes un mes más tarde, hacía un calor de la leche. Respecto a mí parecer este día he tenido unas sensaciones muy buenas, donde he podido meditar un poco como había que tomarse esta dura carrera. Salida tranquila en grupo, sin esos salvajes esprines cuando dan el pistoletazo y empiezan las carreras. Esos tres muros, espectaculares y necesarios para poder mantener esos primeros puestos en la carrera. La verdad es que podría haber andado un poco, pero tengo un problema, no se andar rápido y me tengo que defender a golpe de riñón con un suave trote que en estas largas y empinadas rampas me hacen muy poco a poco sacar un poco de ventaja o alcanzar a mis buenos amigos rivales. Las bajadas doy todo lo que tengo pero es poco. La gente ya sabe correr rápido por las empinadas pistas de bajada con los únicos obstáculos las de las pequeñas piedras que se clavan en la suela de nuestras sufridas zapatillas. La cosa cambia cuando la bajada entra por senderos de bosque. La velocidad disminuye y la técnica tiene un papel importante en estos descensos donde disminuye la velocidad y te dedicas a prestar gran atención a los obstáculos y a los pinos que prácticamente pasamos rozando. Al loro en estos tramos para los que no controlan el descenso, es donde te pueden caer los minutos encima ante un corredor que controle los descensos. Lo mismo ocurre en el descenso de las Peñas de Herrera. Potente bajadon entre piedra suelta y cantos donde hay que meter algún salto que otro. Aquí la ventaja la tiene el que ha guardado un poco de fuerza y no se ha roto en esos2o km que habíamos dejado atrás ante otro rival que llegue a este punto tocado o cansado, donde tendrá que prestar gran atención a controlar la bajada y disminuyendo la velocidad. Otro caso parecido y curioso ha sido el descenso entre Víctor Román y yo. Víctor en las peñas debía llevarme unos dos minutos después de esa larga pista que poco a poco iba ganando altura y en la que me he encontrado mucho mejor que el año. En el descenso he visto que me acercaba a él rápidamente, señal que le pasaba algo. Yo por otro lado notaba como toda la piel de mi talón se deslizaba entre mi zapatilla y mi carne que me hacía perder la estabilidad al apoyar, donde prestaba más atención a mi dolor que al terreno que Pisaba. Cuando Víctor me ha dejado pasar después de haber tirado y controlando toda la carrera, un claro pensar de que algo le pasaba. Intento tirar pero veo que no me despego y es que yo tampoco puedo hacer filigranas, voy buscando charcos para aliviar mi escozor de talón y cuando llegamos ya al lado del pueblo y a la pista. Veo que Víctor arriesga sin saber si sus piernas podrían aguantar el tirón o no. Sus músculos aguantan y yo no puedo hacer nada para pillarle. Enhorabuena Víctor.
4 comentarios:
Donde te puedo mandar un par de foticos de Talamantes 2010?
Mariote
mandalas a samusanchez@hotmail.com
y gracias, nos vemos en la proxima.
Una carrera espectacular y el dorsal 146 increible como siempre...
GBP
Mucha suerte en tu próxima AVENTURA bicicletera ¡¡Campeón!!
Publicar un comentario