Hemos hecho muchos kilómetros por sitios que hasta pasar nosotros no había pasado nadie en bicicleta por estos lugares.
Esto nos decían todas las personas a las que preguntábamos. La verdad es que hay mucho desconocimiento del territorio. PLas gentes natales de todas estas zonas solo conocen sus proximidades, sus valles y su zona de pastoreo. Por eso queríamos salirnos un poco de la rutina de esas peligrosas carreteras con mucho tráfico y pocos arcenes y pasar a otro mundo muy distinto a las de congestiones de gente.
Eso sí, todo este magnífico viaje que tanto me ha hecho pensar, conocer, imaginar, ver, entender, disfrutar…etc. También he conocido a gente estupenda que sobreviven en esos pueblos como mejor saben. A los niños no les falta la sonrisa. Los habitantes te ofrecen sitio para dormir, te cocinan un buen Tallin con ese jugoso pan para cenar o comer y en ningún momento te falta ese Te que sacan estos habitantes en los pueblos o los pastores en el monte.
Ves muchos contrastes en la forma de ser de la gente muy distinta a lo que estamos acostumbrados aquí en Europa. Muchos niños tienen más de 3h al día para llegar a las escuelas y otras 3 para regresar. En estos pueblos de altura pasan el invierno sus habitantes y así aguantas las grandes nevadas en sus casas.
Vivir todo esto no hubiera sido posible sin mis compañeros de viaje. Dos amigos marroquís: Mohamed Boukerym y Hafid, dos excelentes corredores de montaña y también han demostrado gran destreza y fuerza con la bici.
El otro compañero de ruta, promotor de este viaje y conocedor de la cordillera del Atlas como pocos es Jorge Divi, amigo y mecánico de bicis en la tienda de Sabiesport de Sabiñánigo que además de llevar más de 15 años viajando constantemente a Marruecos. Escribir una Guía de Btt de rutas por el Atlas y con otra guía casi acabada en proyecto sobre rutas a pie por la cordillera. Además habla el Bereber. Que más se puede pedir.
Gente como esta que te lleva , te explican las costumbres que no conoces de estos lugares, te enseñan palabras obligadas por lo menos para ser cortes con las gentes y un montón de cosas más.
Con todo esto aprendido y enganchado a este país, no me despido de volver, pues actividad, montaña, exploraciones, Sky, carreras por estas montañas las tenemos solamente a dos horas de avión hasta Marrakech desde Barcelona o Madrid y muy próximamente parece ser que van a poner vuelo directo desde Zaragoza.
En esta ciudad podemos disfrutar de la plaza Jema el-Fna que es la única plaza en el mundo donde durante todos los días del año hay actividad tanto cultural como gastronómica gracias a sus docenas de puestos o restaurantes desmontables que tenemos día a día. También tenemos la gran Medina donde se entrelazan calles y calles entre tiendas y comercio de todo tipo que os podéis imaginar.
ESTOS SON LOS TRACK
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