A MI AMIGO DIEGO.

Un día leyendo el periódico hubo una noticia que me sorprendió. Un chico de Barbastro iba a realizar un viaje en bicicleta desde la expo de Zaragoza hasta las olimpiadas en Pekín. La noticia y la idea me gusto y seguí el viaje atentamente durante los dos meses que duro esta fantástica aventura de 12000 km. También me puse en algún momento en el lugar de Diego, pensando en lo que yo hubiera hecho en los momentos más críticos de tan fascinante viaje. Diego Ballesteros acabo el viaje muy satisfactoriamente y durante los meses posteriores se dedico a hacer alguna charla o proyecciones por los pueblos donde lo llamaban. Yo coincidí con Diego en el Pueblo de Senegue donde nos contaba con gran emoción sus vivencias y sus anécdotas por esos países. A mí también me fascino como cicloturista que soy, viví todo su relato y luego tuvimos una larga charla entre nuestras experiencias en este mundo. Allí nació una buena amistad, nos intercambiemos números de teléfonos, Mails y quedamos que en alguna buena ruta teníamos que quedar. A Diego le vi con muchas ganas de seguir adelante en este mundo, con muchos proyectos y con muchas ganas de aventura. Pero es que el cicloturismo es así, “Engancha y mucho”. Al año siguiente iba siguiendo los pasos de Diego y lo veía ya como un ciclista con grandes retos y como junto a sus 5 compañeros se convirtieron en los Titanes del desierto en Marruecos, su transpirenaica y todos sus viajes anteriores.
Esta primavera preparando mi viaje cicloturista desde Atenas a Sabiñanigo me acorde de Diego, lo llame, le invite a acompañarme y él me animo mucho, me quito muchos miedos y dudas que podía tener por esos países y se intereso mucho por mi viaje, disculpándose de no poder venir. Pues para esas fechas tenía ya organizada esa durísima carrera de 3000 Millas denominada la “ Race Across America” Que cruza todo estados unidos en compañía de sus compañeros de equipo COANFI DESAFIO AMERICA. Diego también me invito para cuando acabara esta carrera a ser su compañero en otra gran aventura cuatro días después de acabar la carrera. Consistía en cruzar todo Canadá de Sur a Norte adentrándose en Alaska hasta acabar ese mes que tenia de vacaciones. La verdad es que Diego me puso los dientes largos y medite un poco sobre el tema, pero no tenía tantas vacaciones como para acompañarle. No por ello dejamos de hacer planes y me animo para que el año siguiente fuera su compañero en una de las carreras más duras del mundo por etapas y en Sudáfrica, “LA ABSA CAPE EPIC”, 8 días de carrera. Bueno era una buena Idea. Yo seguí con mi viaje y Diego con el suyo.
Maldita sea ese fatídico día del 16 de Junio. Donde yo tuve un fortísimo accidente siendo arroyado por un turismo y ocasionándome varias heridas y algún que otro hueso roto cuando acababa de Pasar por Perpiñán a 15 km de la frontera Española a falta de un día para acabar la travesía Atenas Barcelona.
Al día siguiente desde el Hospital de Perpiñán me entere de la fatídica noticia de que Diego también había sido arrollado el mismo día por otro coche en Estados Unidos, cuando ya habían pasado el ecuador de esa brutal carrera y que su estado era crítico. En este mes he estado pensando mucho en el accidente de Diego e intentando enterarme de su situación ahora que ya puedo moverme por mi mismo. He mantenido comunicación con él y ahora ya en España me ha dado la Noticia de su estado. Ya con casi todas las pruebas posibles realizadas me ha comunicado que tiene aparte de sus lesiones de sus 4 costillas rotas, de su tibia y peroné, también me dijo que tenía tocada la Medula y que casi seguro que no podría volver a andar (pero no hay que perder la esperanza). La verdad que me he quedado destrozado con esa noticia, pero también me he dado cuenta de la fuerza de Diego, de sus ganas de vivir, de salir adelante, sabe que va a tener que elegir otros caminos distintos a los que estaba acostumbrado, pero según sus palabras la vida sigue. Es increíble su fuerza interior, Diego casi me ha tenido que animar más a mí que yo a él. Sé que conseguirá todo lo que se quiera proponer porque es un gran deportista y esta acostumbrado a luchar por todo lo que desea hasta el final. Diego que sepas que todos los ciclistas y deportistas somos una gran familia con la que puedes contar porque comprendemos esa situación que estás viviendo y que otro día nos puede pasar a cualquiera.
Diego espero verte muy pronto lo máximo de recuperado, seguro que sabemos algo de ti por las noticias y nos sorprendes con nuevas hazañas a las que nos tienes acostumbrados aunque no tengan nada que ver con el ciclismo.
Un Abrazo de Samuel.