Correr montañas bajo cero

Llego el puro y duro invierno y con el dejar de correr en manga corta y pantaloneta. No hay mayor problema, todo es saber adaptarse a correr con frio y a llevar mas o menos ropa, dependiendo de la temperatura a la que nos encontremos. Esta tarde he venido de correr por la sierra con una temperatura por debajo de los cero grados y por ello me ha dado por pensar un poco sobre este tema. La verdad que asomarte a la calle y decir, “uf, que frío, da pocas ganas de salir a correr. Pero si realmente lo deseas, sal a correr por mucho frío que haga, siempre y cuando tengas en cuenta algunas cosas.

No es lo mismo salir a correr cerca de tu casa, que enseguida puedes encontrar refugio ante cualquier inclemencia meteorológica. Que decidirte a dar una vuelta por la montaña de más de 15 km en donde no hay refugio y seguramente no encontraremos a nadie.

En este caso tú eres el único que te puedes ayudar, por lo tanto habrá que ir con más cuidado al correr, no vayas a tener alguna lesión importante y por tanto quedarte allí, por ello es muy importante salir con teléfono móvil.

Cuando corres el calor corporal que generas, hace que tu cuerpo tenga un equilibrio térmico respecto a la temperatura de fuera. No pares a descansar ni a nada más de un minuto ante las bajas temperaturas. La temperatura que tenemos dentro cambia rápidamente y empiezan los tembleques hasta quedarte helado en caso de no llevar ropa de abrigo. Es por ello que un accidente puede resultar fatal.

Cuantas veces he subido al Puerto de Sta Orosia o algún otro monte a mas de 8 grados bajo cero, sudando y subiendo esas duras cuestas que enseguida te hacen entrar en calor, solamente con unas mallas y mi camiseta térmica. Ya por arriba te encuentras 2mm de hielo en las costillas a consecuencia de mi sudor helado que ha traspirado la camiseta, por ello la gran importancia de llevar una buena camiseta térmica que eche el calor para afuera. En este momento si sigues moviéndote no tienes frio, pero sí que te pasa por la cabeza el “por favor que no me tenga que parar por nada”, pues podría resultar fatal.

Por ello la gran importancia de salir bien preparado, llevar ropa en alguna pequeña y cómoda mochila. Para correr es mejor vestirse por capas e irte quitando las que te vallan molestando en vez de llevar un recio abrigo que te va a empapar de sudor y no te lo vas a poder quitar. Para correr con temperaturas bajo cero, basta con tener unas buenas mallas, una buena camiseta térmica que se adhiera bien al cuerpo y sea de manga larga, con ella podrás correr con muy baja temperatura cuando tu cuerpo se haya equilibrado. Una buena zapatilla con unas buena suela que agarre ante posibles piedras heladas, unas polainas cortas en caso de correr por la nieve, un buen cortavientos también es necesario aunque lo lleves colgado en la cintura, unos guantes de forro polar son ideales, son cómodos y aguantan bien el frio. También es importante llevar algún buff para el cuello y la cabeza que es la parte del cuerpo por donde antes se pierde el calor y unos buenos y cómodos calcetines térmicos.

Ten también en cuenta que cuando llegues al coche estarás mojado y sudado, además el vehículo también estará por dentro hasta bajo cero hasta que se caliente. Ten ropa seca para cambiarte. El cuerpo te lo agradecerá.

Samuel